Quien les escribe considera al chavismo y al madurismo exactamente la misma cosa, la única diferencia es que Chávez tuvo recursos por doquier, lo que permitía disimular el desmán que se cometía. La quiebra de Pdvsa, por corrupción y desprofesionalización, hizo que Maduro no contara con esa chequera en blanco e inmediatamente los problemas que se ocultaban no duraron en salir a flote: destrucción del aparato productivo, dinero inorgánico que empujó la peor hiperinflación del planeta, así como la corrupción más atroz jamás registrada, entre un sinfín de etcéteras.
En 2012 y 2013 Chávez y Maduro supieron como revertir una diferencia de aproximadamente 15% en su contra, desde luego, y como lo confesara la mano derecha económica de Chávez, Jorge Giordani, utilizando todas las instituciones, armas y recursos de la nación a favor del psuv. En 2018 sencillamente se inhabilitaron los partidos opositores con probabilidades de triunfo y se perpetró unas presidenciales entre candidatos exchavistas, tan ilegal e ilegítima que generó desconocimiento al régimen y sanciones.
En este 2024 nada es igual a procesos electorales anteriores, aunque el chavismo/madurismo continúa teniendo el control absolutista de las instituciones, armas y recursos, la diferencia con quien ocupa el primer lugar en intención de voto, Edmundo González, es abismal, 40 puntos y subiendo. El rechazo al chavismo/madurismo es tan evidente, público y notorio que hasta los participantes a los actos del régimen confiesan públicamente solo asisten obligados o para recibir dádivas como dólares, comida o gasolina.
Además, el castrismo venezolano (chavismo/madurismo) está siendo tratado con disimulo, casi apartado en su totalidad, por regímenes afines como el colombiano y el brasilero, e incluso, llaman a Maduro a reflexionar acerca del tema electoral, para que respete resultados y permita una ansiada transición hacia la democracia.
Tras un cuarto de siglo en el poder, el régimen anda absorto, desesperado, esquizofrénico, repitiendo discursos y mismos libretos intragables como son los fulanos sabotajes, sanciones que afectan y no afectan a conveniencia, magnicidios, golpes de Estado, paramilitares y todo cuanto aconseje en esa dirección los cubanos. Parece obvian que dentro y fuera del país es harto conocido el imparable e imperdible apoyo a Edmundo González/María Corina Machado, en pocas palabras, la tesis de evitar una elección por parte de quien la va a ganar irremediablemente es ilógica, incompresible, absurda.
¿Puede el chavismo dar el palo a la lámpara y atribuirse el triunfo contra viento y marea? Claro que puede, pero las consecuencias serán muchísimo más nefastas para los venezolanos, no para ellos. El país ya no aguanta más desinversión, corrupción, caos, el éxodo sería de pronóstico reservado.
A ese fatídico escenario la gran duda del régimen es ¿Serán los venezolanos capaces de tolerar otras elección ilegal/ilegítima, 6 años más de modelo cubano? Sumando todo lo anterior, cuando se ha visto la luz en el luengo túnel, cuando se ha reunificado al país, se han fijado un rumbo, cuando se dirige con tanta firmeza pues… en lo particular no creemos la nación tolere otro fraude y es eso lo que ha detenido al chavismo/madurismo lanzar su zarpazo contra Edmundo González Urrutia.
Con un rechazo y desgaste irrecuperable, dentro y fuera del país, el grito de libertad vuelve a resonar en el territorio nacional, como hace poco más de 200 años. @leandrotango
Por: Leandro Rodríguez Linárez