Cuarenta y dos años se conmemoran el 5 de enero de este año 2023, de la trágica desaparición de siete coterráneos carvajalenses quienes “intespectivamente fueron arrastrados por una gigantesca ola, en las relativamente quietas aguas del Lago de Maracaibo”, el más grande de América del Sur; en la playa de la población de Gibraltar, municipio Sucre, estado Zulia. Se dice que: “Dios Todo Poderoso” escoge las flores más bellas para llevárselas al cielo.
Como cristianos- católicos que somos aceptamos con resignación y humildad que hermanos y amigos como: Edgardo Altuve, José Ramón León, Isabel Hernández, Gerardo Castellanos, William Núñez, Miguel Quintero y Maritza Hernández; no solamente viven, sino que quedarán por siempre en nuestras mentes y corazones.
Los habitantes de “Mi sagrado suelo” profesan con profunda fe que estos “perpetuados” paisanos están cumpliendo la santa voluntad del “Creador”, quien les ofrece con su amor divino una vida feliz y la anhelada vida eterna.
HECHOS Y SUCESOS
En una mañana del 5 de Enero de 1981, mueren siete seres amados; su pérdida deja un vació inexplicable en el seno de sus familias, amigos, casas de estudio, círculos deportivos, coro parroquial de la iglesia San Rafael Arcángel y en la agrupación “Tradición Gaitera” de Carvajal.
Una inesperada noticia recorrió el municipio y la región “que un fuerte oleaje arrastró lago adentro a un grupo de bañistas” que integraban una excursión organizada por Monseñor José de Jesús Núñez Viloria, cura párroco y guía espiritual de aquella época.
Esta actividad recreativa se había iniciado a tempranas horas del día para abrazar el sol y el “Lago del Coquivacoa”; conocido igualmente como el “Lago de Udon”.
Este paseo lo integraban 25 “adolescentes” residentes en Carvajal, recompensados por Monseñor Núñez Viloria en reconocimiento a sus actividades desempeñadas con entusiasmo y devoción en el mes de Diciembre de 1980 en cientos de eventos como: misas de aguinaldos en los diferentes templos y capillas de la parroquia eclesiástica, reuniones con las sociedades, cánticos en los pesebres, participaciones en festivales y concursos de gaitas y villancicos que preparó la iglesia unido al grupo “Tradición Gaitera”.
Actualmente las voces e imágenes de estos apreciados jóvenes: hombres y mujeres; continúan grabadas en cada uno de los recuerdos de los carvajalenses del ayer y hoy, figuras que se reproducirán eternamente, aún después de muertos.
En el sentimiento de sus padres, en sus círculos íntimos y ex compañeros de clases, en los cristianos – católicos, en el sentir de los gaiteros y del pueblo en general que vive con la esperanza de la resurrección y el pronto reencuentro en la “Casa de Dios”. Indudablemente que la confianza en “El Creador” ayuda a afrontar sus sentidos fallecimientos.
Hecho inesperado que ocurrió justo a escasos dos días para el retorno a clases. Eran animados soñadores y estudiantes del Liceo Monseñor Estanislao Carrillo y del Núcleo Universitario Rafael Rangel.
Con alegría un Lunes 5 de Enero de 1981 tomaron un autobús alquilado de la ruta urbana de transporte, Línea Valera – Carvajal, propiedad del señor Benito Marin (+) y tripulado por Amado Valero (+), a las 6 de la mañana, y marcharon rumbo al balneario de las “soleadas” playas de Gibraltar en el que jamás regresarían al mundo por demás maravilloso de la bella “Meseta de Estovacuy”.
A la “Sabana Larga” de su soñar, ni a su “Carvajal Querido”, ni tampoco a la “Sabana de Los Truenos” de Ramón “Lapo” Rivas Aguilar, y mucho menos a «Mi pequeña Nación”.
Lágrimas y llantos, escenas de dolor se paseaban por el municipio y todo Trujillo; las traicioneras aguas de Gibraltar se llevaban materialmente a siete “muchachos” que serán resucitados para vivir en la gloria, en la “Tierra de Dios”. Todo esto está grabado por siempre y para siempre en la memoria de la memoria de los carvajalenses.
En este momento están cantando felices y contentos junto a celestiales coros de Ángeles y Arcángeles cerca del “Señor”, arrullándolo con dulces canciones; están con los “Cinco Negros”, canturreando los versos de hermosas gaitas del pasado, como la de William Atencio y “Los Gaiteros del Viejo Víctor”:
“Se formo un gaitón en el cielo
en el solar de San Pedro,
Se escucha la algarabía
de nuestra gaita zuliana
desde el reino de los cielos
notas cual tu piel aufanan
Los versos los hace “Chinco”
“Ray” y Ricardo cantando
“Reyito” tocando el cuatro
y “Don Pedro” esta animando
Se formo un gaitón en el cielo
todo se vuelve alegría
San Pedro, San Lucas, San Marcos,
San Carlos y San Tobías
cogierón los instrumentos
para está gaita poder tocar
y así acompañar a Pedro y a “Chinco”,
a “Ray” y a “Reyito”,
y a Ricardo Aguirre El Monumental”
EXEQUIAS Y FUNERAL
Una colectiva manifestación de duelo acompañó a las victimas de está absurda tragedia de Gibraltar durante las exequias en el Sagrado Templo Parroquial de Carvajal, en los días posteriores a los acontecimientos donde los demás integrantes del Coro de San Rafael Arcángel y del conjunto “Tradición Gaitera” les rendían guardia de honor a sus fieles compañeros desaparecidos.
La solidaridad humana no se hizo esperar, “…el dolor desgarrante de familiares y amigos se extendía por la inmensa muchedumbre y sobre los rostros curtidos de arrugas y las frescas mejillas juveniles, un rió de lagrimas ” sin cauce alguno colmaba las riberas de los alrededores de la plaza Bolívar, sitio que fue insuficiente para albergar a toda la concurrencia que asistió al velorio y el sepelio.
Diversos sectores de la vida trujillana se hicieron presentes en los funerales que se oficiaron. La solemne misa luctuosa concelebrada fue presidida por el Obispo Diocesano del tiempo pasado, Monseñor José León Rojas Chaparro (+) y por Monseñor José de Jesús Núñez Viloria, conjuntamente con otros destacados dignatarios del clero venezolano después de las 4 de la tarde del 6 de Enero.
Presente estuvo la gobernadora del momento Dra. Dora Maldonado de Falcón; personalidades, políticos y representantes de diversas instituciones públicas y privadas que acompañaron la dolorosa ceremonia litúrgica.
El pueblo se volcó a la plaza Bolívar y a las calles para acompañar el cortejo fúnebre que salió de la iglesia hasta el “terreno ajeno” del sector “La Zamurera”, conocido en los actuales momentos como la urbanización “El Mirador” ó el “Cementerio Nuevo”.
En ese instante oscurecía la tarde y se prolongó inclusive pasada las 7 de la noche. Fueron sepultados en primer lugar 6 de sus hijos: Edgardo Altuve, Isabel Hernández, Gerardo Castellanos, William Núñez, Miguel Quintero y Maritza Hernández. Al cabo de un tiempo trasladaron los restos mortales de José Ramón León a Carvajal, otro de los “malogrados” de Gibraltar.
Tristemente “sus aguas se encargaron de ahogar todas aquellas esperanzas, ese día del 5 de Enero de 1981 la vida les deparo una trágica jugada. El viento playero no acaricio más sus vivas carnes”.
Dicho cortejo fue acompañado por más de 3 mil personas que acudieron llorosamente hasta sus últimas moradas. Se calcula que ha sido la mayor congregación que recuerde la historia de Carvajal, es decir, que se haya reunido en “Mi sagrado suelo”.
GAITA HOMENAJE A LOS GAITEROS
Para finalizar, esta humilde crónica, recuerdo que desde la población de La Cejita, el reconocido músico y gaitero, Carlos Ramírez, compuso y vocalizó un tema titulado «Homenaje» que fue grabado por la agrupación valerana «Ronda Gaitera» quien presentó un hermoso trabajo musical preparado para recordar a todos los desaparecidos en las playas de Gibraltar, a Edgardo, José Ramón, Isabel, Gerardo, William, Miguel y Maritza; y a su vez enviar un mensaje de esperanza que sirvió en su oportunidad para dar aliento a los familiares de los amigos que partieron muy temprano al encuentro con nuestro «Señor».
Era un 5 de enero
Que reinaba la alegría
Saliendo un grupo gaitero
A la playa todo un día
Iban solo a despedir
A las fiestas decembrinas
Sin saber que en esas aguas
Estaba su despedida
CORO
Carvajal, ha perdido para siempre
Gaiteros que le cantaban
Gaitas bellas a la «china»
Pero a ti virgen divina
Solo te pido un favor
Que junto a los 5 negros
Los tengas con gran amor (Bis)
EN HONOR A LOS “COMPAÑEROS DESAPARECIDOS ” DE GIBRALTAR…
(Crónica en honor a los “compañeros desaparecidos” de Gibraltar)
Por Marcos Montilla (*)
- Abogado, columnista y ex alcalde de Carvajal
CARVAJAL: Es Historia y Tradición