Dispuesta, un poco tensa, pero decidida a dar el paso.
Constanza Ruiz, joven de 25 años, acudió a las oficinas de TC Consultores, prestigioso bufete de abogados de Santiago, ubicado en Providencia, pasadas las 8:00 de la mañana del pasado miércoles 26 de noviembre.
Lo hizo acompañada por Antonia Domeinko, periodista de El Mercurio y dos representantes, uno en lo editorial y otro en lo jurídico, del periódico fundado hace 224 años en Santiago de Chile.
Ruiz había conocido a la reportera en una entrevista pocos días después de hacerse viral en un video en el que profiere insultos xenófobos y golpea dos veces en la cara a Deivis Agüero, conductor de aplicación de 56 años y de nacionalidad venezolana.
Allí, Braulio Jatar, director de Asuntos Internacionales de la firma las recibió. En una de las oficinas se encontraba Agüero y su hijo Ronald. El equipo de El Mercurio pidió entrevistar a Deivis.
Jatar cuidó siempre que primara el ambiente de convivencia:
Este acuerdo busca contribuir a que en Chile, tanto nacionales como extranjeros, encuentren un entorno libre de violencia, ya sea física, psíquica, verbal o de cualquier índole, sin importar la nacionalidad que ostente una persona”, expresaba al leer una parte del documento.
Desde su ingreso en el despacho, el taxista de 56 años se mostraba incómodo, con los hombros caídos y la mirada sin rumbo fijo -por momentos-. Tanto Constanza como Deivis habían negociado con sus apoderados un histórico acuerdo DE JUSTICIA RESTAURATIVA que los llevó poco después a Notaría, donde Ruiz atendió a Crónicas de Chile y Versión Final, únicos medio venezolanos en el lugar, para pedirle disculpas públicas a la comunidad criolla.
El testimonio
“¡Buenos días! Mi nombre es Constanza. Como ustedes saben, soy la chica que agredió al conductor de taxi. Yo les quiero pedir disculpas a toda la comunidad venezolana. No estuvo bien lo que hice, lo reconozco. Estuvo muy mal de mi parte”.
De esta manera, Constanza comenzó con sus palabras para referirse a lo ocurrido dentro del taxi del señor Deivis el pasado 14 de noviembre.
He pasado momentos muy difíciles en mi vida, pero eso no justifica el haber lo que ocurrió. Yo comparto con gente venezolana, yo tengo amistades venezolanas, amigas, amigos, en mi universidad también. Entonces yo, de verdad les pido disculpas por mi comportamiento”, añadió.
Ruiz aseguró que necesita un cambio en su vida. “Y esto es una elección para que yo aprenda a mejorar y a ser otra persona”, sostuvo.
-¿Qué fue lo que pasó ese día, Constanza? ¿Por qué estabas tan hostil?
-Bueno, ese día estaba hostil porque, bueno, en la Universidad hay un par de compañeros que me hacen bullying y yo ese día estaba revisando mi tesis y ellos estaban riéndose mientras yo estaba haciendo la tesis y salí muy ofuscada, muy ofuscada. Pero eso tampoco justifica yo haber agredido al conductor.
-Hay otras personas que también denuncian que tú has tenido posiciones o situaciones agresivas.
-Los conserjes de mi departamento dicen que yo he sido una persona agresiva, pero es que el conserje de mi departamento se me estaba insinuando, diciendo que yo merecía un hombre con estabilidad, ya que yo vivo sola y ellos me están ofreciendo plata, etc, por eso yo también me defiendo en momentos así, porque como me ven sola. Yo tengo veinticinco años, pero siempre me dicen que me veo más chica.
-Mira, Constanza, hay un tema, y es el de tu adicción a las drogas, me gustaría que hicieras una reflexión en torno a ello.
-Bueno, yo fui adicta, como muchos años tuve el problema de adicción, desde mis 13 hasta mis 18 años estuve en el Sename (reformatorio juvenil de Chile), vivía en la calle. Todo esto me ha traído consecuencias en mi vida y ahora es un momento de cambiar y tener un mejor tratamiento. Con un psiquiatra que sea el mejor psiquiatra o un psicólogo para yo mejorar mi vida y cambiar y ser una persona buena. O sea, yo me considero una persona buena, de buen corazón, pero sí hay cosas que debo mejorar. Todos somos seres humanos, nos equivocamos. Yo le pido al pueblo venezolano que no me miren como una persona mala, como una persona asesina. Todos nos equivocamos. Yo sé que me equivoqué. Yo sé que a todos los metí a todos en el saco con las palabras que dije. Es como que ustedes dijeran por mi conducta que todos los chilenos somos iguales y eso no corresponde. De todo corazón le pido disculpas al pueblo chileno, al pueblo venezolano, y esto no volverá a ocurrir más de mi parte, porque esto va a mejorar.
Constanza aprovechó la oportunidad para enviar un último mensaje a toda la comunidad venezolana que la veía y escuchaba: “Les pido no más mensajes dañinos ni de odio en mi cuenta. No quiero más ataques, más agresiones ni tampoco solicitudes de amistad tampoco, porque en mis redes yo tengo fotos de mi familia y han amenazado a mi familia. Les pido por favor, en mi familia muchos sufren de hipertensión, son personas que tienen enfermedades. Entonces les pido por favor, yo no vivo con ellos. Ellos son parte, pero no tienen culpa. ¡Por favor, les pido que sean un poco más consecuentes con ese tema!”.